sábado, 23 de noviembre de 2013



- no nos volveremos a ver. Bueno?

No respondió.
El cerró los ojos y sin gesto alguno en su rostro, perdió el aliento.
El ataúd desendiose hasta lo mas profundo y el silencio apoderóse del bosque.
En el sacramental todos los cuervos permanecían de luto, y el viento ya no cantaba su canción.
Ella poco a poco desvanecía en vida, deseando acabar con todo, pero temiendo por lo que hubiese luego del sendero al que todos intentar llegar guiados por una luz.
Las lagrimas deslizóse lentamente por sus mejillas sellando un ciclo, pero el dolor..

el dolor abrió un portal, que daría paso a un rencuentro. A un nuevo comienzo.